miércoles, 17 de agosto de 2011

Reciclaje

Completamente gigantesco me siento, pero tengo la sensación que me deja un sabor amargo en mi alma, el sentir mi inútil esfuerzo por recobrar lo que alguna vez fui. Pensando y analizando que he realizado quizás una hazaña para algunos, un viaje o más bien conocido como reencarnación, me encuentro aquí en medio de la soledad más plena, rodeado de oscuridad y el frío del vacío que me rodea. El panorama me desalienta y me enloquece, en toda dirección que grito pidiendo ayuda, nada ni nadie acusa recibo de mi petición, es lo que más me desdicha.

Nuevas sensaciones y acontecimientos suceden aquí, los cuales nunca antes había experimentado, pero quizás desde tiempos remotos ya sucedían. Mi exterior evoluciona, se mueve, se destroza y nuevamente se calma. Hay una capa exterior extraña que continuamente ataca mi exterior, me congela, me eriza y también se calma, pero las tormentas con que me golpean realmente me dañan. Creo conocer este lugar, cuando era un terrícola solían llamarlo Júpiter ¡Ahora me llaman Júpiter! ¿Soy un planeta ahora?

Creo que algo grave ha sucedido aquí, en alguna parte debería estar el sol, pero es imposible hallarlo aquí ¿en qué podré acogerme cuando me sienta solo? ¿Estaré siendo castigado? Algo extraño nuevamente comienza a suceder aquí. Es una sensación difícil de explicar. Nuevamente me siento desorientado y ahora retraído en este lugar. Situaciones escalofriantes y turbias me rodean. ¡Qué espacio más extraño! Jamás pensé que pudiese ser tan tenebroso. Es realmente estar en un pantano rodeado de grandes árboles con gigantes y antiguos helechos colgando de ellos. ¿Dónde estoy realmente? Atacado sutilmente por los helechos me encuentro. Pido que me suelten, hacen caso omiso. Me siguen dirigiendo hacia un túnel de gusano (al menos eso creo que es) el cual me espanta por su aspecto.

Maldita sea. Jamás quise morir para llegar a esto. Pero ahora en este lugar, en este cómodo y apacible lugar, siento un calor y una vibración agradable, que creo haber sentido antaño. Pero qué raro, he pesado una eternidad aquí y aun no encuentro un sol, pero la comodidad de este lugar me reconforta. De un instante a otro un mal presentimiento me invade, y no me equivoco. A la distancia una mancha gris se acerca a gran velocidad. El miedo me invade ahora, mi corteza exterior, mi piel, se prepara y mi alma, si, mi alma se prepara para dar nuevamente el fin a su existencia. Qué placentero fue habitar este lugar. Siempre seré parte de este lugar y aun con esperanza confío en los recuerdos esenciales que me conectarán con este lugar, de alguna manera lo siento pero no lo explico.

Mi alma suda. Mi corteza no entiende nada en este punto, y esa mancha, ya no es una mancha, sino una lluvia de asteroides que se encuentra cada vez más cerca. Este es mi fin. Siento que han pasado ya unos 20 o 30 años desde que albergué esta forma, este planeta, mi querido planeta. Ya es hora de decir adiós y decir que una vez más, he sido reciclado por la vida. Mi destino quizás me lleve a un lugar menos angustiante, pero no tan emocionante como este. Al fin y al cabo no somos más que fieles cumplidores de ciclos en la naturaleza.

Ya es hora, veo las colas de esos millones de asteroides. La embestida final es inminente. Prepárate, se fuerte. Aquí vienen. Para mi sorpresa muchos siguen su curso y otros me rodean, tratan de sigilosamente buscar alguna entrada. No entiendo lo que buscan, lo que quieren. Esperaba haber sido destruido en un abrir y cerrar de ojos. Repentinamente me siento penetrado, mi núcleo es alcanzado por uno, lo siento aun, es mi fin. Voy a …

Puedo respirar, siento el pecho hinchado ¡Puedo respirar! Por favor no más, no más. Una enorme palma me golpea y un estruendoso llanto brota desde mis pulmones hasta salir por mi boca. Aun no entiendo que sucede.

domingo, 14 de agosto de 2011

Benigno egoísmo

La constante búsqueda del camino acertado no siempre te lleva a encontrar el camino correcto. Estos caminos pueden dejar huellas en la forma de ver las cosas. Cada uno debe ser capaz de darse cuenta cuales tomar y cuáles no. Cada uno debe ser capaz de saber escoger el camino errado, esto para entender cuál es el camino correcto.

La única manera de llevar a cabo la vida es vivir de forma egoísta. Esa forma tan hermosa, tan cautivante. La que te dice que no vale la pena incluir a alguien más. Para qué, si lo único que hace es tratar de remover tus intereses, confundir tu meta. Basta con ser autosuficiente. No depender de algo es sumamente importante.

Puede que suene como algo moral y socialmente malo, mi punto no es nuevo, pero si vanguardista. Puede que sea un defecto, y mi mayor virtud, son mis propios defectos. Haciendo que no tenga que depender de nadie más que yo, para poder pensar de forma autónoma, y sentirme realmente libre. ¡Vaya que si es cautivante!

Qué es moral y políticamente correcto, tengo el poder de decidirlo yo mismo, para qué aceptar puntos de vista diferentes si puedo imponer mis términos. Eso sí, sería aburrido que no hubiesen puntos de vista distintos, pero al fin y al cabo no los tomaría en cuenta, porque cuando aún más discuto, mas me da rabia saber que pelear teniendo siempre la razón es una pérdida de tiempo. Tener que gastar de mi preciado oxígeno en palabras y frases que no llevarán a consenso, y siempre teniendo la razón.

La humildad puede ser algo completamente desechable y practicable. El pedir perdón hace que reconozcas errores incluso cuando no los hay. Si ser humilde te lleva a pedir muchas veces perdón, entonces te has convertido en un pobre idiota. Date cuenta que terminarás reconociendo cada error y te convertirás en un ser lleno de errores, en una vida que los errores son irrelevante y las consecuencias las importantes. Si se te juzga será por las consecuencias y no por los errores. Pero sé egoísta y no permitas que sepan tus errores, no habrá consecuencias.

Por más que parezca que es el modo errado, no es un error. No hay nada que hacer frente a tu propio egoísmo, más aun si demuestras siempre que tienes la razón. No puedes escupir al cielo. Se vanguardista, practica el egoísmo, se irónico, manipulador, autodidacta, autónomo y dictador, y verás lo cautivante que te puede resultar y el placer que provoca ser egoísta. Si a fin de cuentas, si no lo haces así, terminarás decepcionado de quienes menos lo esperas.